De los diez espectáculos escenificados por los integrantes de Magiluth desde 2004, año de creación del grupo en Recife, cinco fueron escritas por Giordano Castro: Um torto –Un curvo– (2010), Aquilo que o meu olhar guardou para você –Lo que mi mirada ha guardado para ti– (2012), Luiz Lua Gonzaga –Luiz Luna Gonzaga– (2012), O ano em que sonhamos perigosamente –El año en que soñamos peligrosamente– (2015), en colaboración con Pedro Wagner, y Dinamarca (2017). Aunque la autoría sea firmada por Castro, también actor y director, el trabajo colaborativo que marca los procesos de Magiluth es una de las características de la elaboración de estas dramaturgias. El juego entre los actores, detonante de las experimentaciones en la sala de ensayos, ofrece la principal subvención para que el autor pueda erigirlas.
Además, el trabajo de escritura es también una composición, un bricolaje, a partir de los fragmentos y las referencias, que pueden ser de naturaleza muy distinta y van surgiendo durante cada puesta en escena. La lista de materiales y lenguajes que inspiran las creaciones de Magiluth es diversa y amplia: cine, música, fotografía, vídeos de YouTube, literatura, poesía, dramaturgias clásicas, danza, cultura popular, etc.
En la obra Aquilo que o meu olhar guardou para você –Lo que mi mirada ha guardado para ti–, el proceso de construcción dramatúrgica se desencadenó a partir del intercambio de fotografías de Recife y Brasilia, entre los integrantes de Magiluth y del grupo Teatro do Concreto. El texto explora las relaciones, su fragilidad y la potencia de los encuentros, en narraciones que dan lugar a diálogos seguidos de cerca por el espectador. Esto sucede no sólo por la forma en que la puesta en escena fue idealizada por Luiz Fernando Marques, Lubi, el director de la obra, que lleva al público al escenario a partir de cierto momento, rodeando a los actores en pequeñas ruedas, sino también por la coloquialidad de la dramaturgia.
Esta misma característica también provoca una impresión intencionada de improvisación, como si el texto dicho por el actor hubiera surgido de alguna situación específica que sólo se diera en esa determinada representación. Es cierto que la improvisación es una de las facetas de Magiluth y que los textos no siempre se siguen al pie de la letra, y estos cambios acaban incorporándose a la dramaturgia como si las obras estuvieran siempre abiertas, en proceso. Pero en el caso del texto de Aquilo que o meu olhar guardou para você –Lo que mi mirada ha guardado para ti–, esta impresión es sobre todo el resultado del pensamiento que llevó a la estructuración de la dramaturgia, que mezcla imágenes poéticas que imprimen ligereza y abstracción con coloquialidad.
A lo largo de la trayectoria del grupo, el espectáculo más radical en su forma es O ano em que sonhamos perigosamente –El año en que soñamos peligrosamente–, porque la dramaturgia y la puesta en escena se montan a partir de un dispositivo de juego. La primera parte del texto está abierta a múltiples combinaciones, realizadas a partir de las acciones de los actores, como un guion abierto que nunca se repite de la misma manera. Hay algunas secuencias y escenas que son fundamentales para la puesta en escena, pero lo que pueda suceder entre ellas, cómo se combinarán los textos, por qué actores se dirá, sucede en la inmediatez del juego. Tanto es así que la obra se estrenó con cinco actores y ya ha sido presentada por tres, sin perjuicio de la representación.
Dos recursos recurrentes en el repertorio del grupo se utilizan de forma vertical en el espectáculo. Una de ellas es la fragmentación del texto, con referencias diluidas e intercaladas que van desde movimientos populares como “Ocupe Estelita” hasta las películas del griego Yorgos Lanthimos y pasajes o incluso expresiones de dramaturgias de Nelson Rodrigues y Tennessee Williams [nota de traducción: el movimiento “Ocupe Estelita” está formado por abogados, arquitectos, sociólogos, artistas, profesores, ingenieros, estudiantes, médicos, administradores, publicistas, periodistas, diseñadores y antropólogos, entre otros, que desde 2012 luchan contra la destrucción de un muelle con superficie de unos 101,7 mil metros cuadrados, con un patio ferroviario y una serie de almacenes de azúcar abandonados por las autoridades públicas y que es un hito de y en la ciudad de Recife]. El segundo recurso es la inspiración en las dramaturgias clásicas: en el caso de esta obra, los actores ponen en escena fragmentos de tres obras de Chéjov: La gaviota, El huerto de los cerezos y Las tres hermanas.
Durante la pandemia de Covid-19 en 2020, Giordano Castro escribió y dirigió para el grupo Tudo o que coube em um VHS –Todo lo que pudo caber en un VHS–, Todas as histórias possíveis –Todas las historias posibles– y Virá –Vendrá–, obras que han sido pensadas como “experimentos sensoriales en confinamiento”. Si la presencia de los actores es uno de los aspectos más importantes de la poética de Magiluth, el grupo fue uno de los primeros en el país en potenciar la calidad del encuentro a distancia con el espectador, utilizando programas y dispositivos que se han vuelto muy comunes a nuestra vida cotidiana: llamada telefónica, WhatsApp, YouTube, Spotify, correo electrónico, Instagram. Cada representación fue realizada por un actor para un espectador a la vez.
De esta dramaturgia emanan los afectos que nos movilizan, que mueven el mundo, las relaciones con las personas, con la ciudad, con los acontecimientos que nos rodean y, teniendo como elemento desestabilizador la pandemia, la muerte. Los espectadores, uno por uno, fueron voyeurs de una relación afectiva, en una dramaturgia construida en WhatsApp, utilizando la misma lógica de un feed de Instagram o Facebook. Fotos, audios, vídeos, memes, textos y música componen este texto-escenificación-experimento que, según los actores del grupo, les ayudó a “salvarse” –financiera y mentalmente– durante el encierro.
Además de su trabajo con Magiluth, Giordano Castro escribió Alegria de náufragos –Alegría de náufragos– (2016), del grupo Ser Tão Teatro, de Paraíba, en colaboración con el grupo y con César Ferrario. Los dos artistas también comparten la dirección del espectáculo. Y, en colaboración con Amanda Virgínia Torres, escribió el texto Vento forte para água de sabão –Viento fuerte para el agua de jabón– (2016), que ganó el premio al mejor texto para infancia y juventud en el festival Enero de Grandes Espectáculos 2017, con una puesta en escena por la compañía Fiandeiros, de Pernambuco.
(Pollyanna Diniz)